El jarabe de jengibre puede utilizarse como sustituto de azúcar o miel para endulzar bebidas frías y calientes. También para preparar aderezos y salsas o sobre el cereal, la fruta y los hot cakes. Se recomienda conservarlo en el refrigerador.
El jengibre ayuda en la digestión, cuadros de náuseas (ya sea por embarazo, mareo o quimioterapia), estados gripales, de tos y congestión nasal, y a incrementar las defensas del sistema inmunológico.
Botella de 350 ml